BUFF

Buff nace en Igualada, cerca de Barcelona, en manos de Joan Rojas. Entusiasta de las motos, recorriendo las carreteras de su ciudad, utilizaba su braga militar para protegerse del frío y del viento. Poco a poco, investigando en la fábrica familiar, creó un tubular sin costuras hecho de microfibras; el primer Buff.

El nacimiento de Buff

El empresario catalán, siempre amante del motor, se encontró con un problema en su conducción; la braga militar que usaba para protegerse le molestaba, no se sentía cómodo. Es por eso que, un año más tarde y después de investigar y dibujar diferentes diseños, logró encontrar la solución; una pieza sin costuras fabricada con microfibras.

En sus inicios, algunos familiares y amigos cercanos de Joan probaron la nueva invención, el tubular. A medida que pasaba el tiempo, Joan vio un potencial más allá de fabricarlo para él y los suyos, y creó su primera colección.

Durante los últimos años, Buff ha ido creciendo a pasos agigantados, distribuyendo producto en países como Francia, Alemania y Suiza, entre otros. Y no solo ha crecido en ese aspecto, sino que ha ampliado su variedad de productos, fabricando también gorros, bufandas, y muchos más.

La calidad, ante todo

Lo que empezó siendo una pieza para protegerse del frío y el viento, ha acabado convirtiéndose en tubulares pensados para todo tipo de situaciones; para caminar por la montaña, como complemento de moda o para hacer deporte más intenso. 

Por eso, y por qué está dirigido a todo tipo de público, todos los productos Buff cumplen la normativa de los requerimientos ecológico-humanos para los productos que tienen contacto directo con la piel. La empresa catalana también cuenta con un certificado sobre gestión de calidad y medio ambiente. Además, algunos de sus productos, como el High UV BUFF o el Pack Run Cap BUFF, cuentan con protección para la radiación ultravioleta de la luz solar.

La importancia del medio ambiente

La empresa apoya a diferentes proyectos para la protección y conservación de la naturaleza y el medio ambiente. Por ello, tienen una pequeña selección de productos que califican como “Environmentally Friendly”, como las Infinity BUFF o los Merino BUFF, fabricados con lana de merino. 

Aparte de tener una sección respetuosa con el medio ambiente, la empresa lleva a cabo diferentes colaboraciones, como apoyar la preservación de la ardilla roja en Inglaterra o el saneamiento de senderos en Gales, entro otros. Durante el año 2016 y 2017, Buff ayuda al planeta con la plantación de 2 millones de árboles.

En Campbase, todos admiramos el esfuerzo y la evolución de esta empresa, y confiamos en su constante crecimiento. ¡No te quedes sin tu Buff!